Tus ojos cansados le preguntaron a mis manos,
porque ellas ya no te escriben mas,
al mismo tiempo, mis dedos extrañaron
la sutil suavidad de esa tu piel.
Mis labios esbozaron una sonrisa,
sabedores del gran secreto,
de tal sequia de letras y palabras.
En la oscuridad de mi aposento,
cuando ante el placer absoluto sucumbes,
develas el pergamino excelso y perfecto;
ellos son quienes ahora escriben sobre …
...Todo un amante del amor!! Tu delirio el cuerpo femenino! Gran Poeta!!! Quisiera saber si alguna vez fuiste pergamino de una de tus musas? " Nuestras huellas no desaparecen de las personas q tocamos" preguntale a tu espalda.....
ResponderEliminar