Me pidió que ya no le escribiera, que sus ojos no querían recorrer mis letras. Argumentó una serie de motivos que me llevaron a buscar las más hermosas razones que en palabras refutarian su decisión. Conjugarlas fue mi desafío no podía permitir que su mirada dejara mi senda letrada...
Dicen que los sueños son EFÍMEROS, el mío ha perdurado en el tiempo y es INMARCESIBLE.
SERENDIPIA al mis ojos verte, creando en mi LIMERENCIA en el acto, que MELIFLUO fue oír escapar tu nombre de esos labios y al unir tu cuerpo al mío un momento INEFABLE.
ETÉREO el instante en que ese beso ocurrió, haciendo un ARREBOL en nuestro cielo, marcando nuestra historia.
Amarnos, juntar nuestros corazones y pasiones generaba IRIDISCENCIA en rededor.
Me costó aceptar que fue una EPIFANIA tu amor, para quien durante años fue un SONÁMBULO en largas y eternas noches de SOLEDAD en sombras y tu con esa LUMINISCENCIA llegaste para ser la AURORA de mi vida.
Ojalá baste esta ELOCUENCIA tan mía, para que tus ojos me sigan leyendo. Sé que eso me permitirá estar con mis recuerdos en ATARAXIA total.
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