jueves, 24 de marzo de 2011

Evocación

Hay instantes,
en que mi soledad es compartida por quienes,
en un momento de esta mi vida le hicieron compañía,
en esos sutiles momentos de evocación intima,
de gratas memorias,
es que mi mente alcanza por segundos,
la gloria de un onanismo mental,
al recordar, cuando esa soledad,
se llamaba esperanza.


Pasión

No quisiera linda mujer
que esos ojos, tus ojos,
que me vieron con ardiente pasión
leyesen estas líneas
que escribo con desolación,
abrumado en la soledad,
de mi propia soledad;
empujado al vacio por la brisa
que el cerrar de esos ojos
al no verme más,
al mismo tiempo apago tu pasión.
Pasión inquieta,
pasión exigua,
pasión que se durmió
en tus ojos de mujer.


Estaciones

El cielo se torna gris ante mis ojos,
cae el otoño de mi vida
y el frio invierno
penetro en mi cuerpo.

Preparándome
y al mismo tiempo
acercándome al final
de la línea que marca
el fin del verano de mi vida.

Para entonces al cruzar
ese umbral ínfimo y etéreo
poder iniciar con la verdadera,
primavera de mi alma.



Tierra Baldia

Sopla fuerte viento !!
a ver si en tierra baldía
llega el mensaje,
De quien en ahogado grito
implora ser escuchado.
Marchito clamor de esclavo herido,
al oír la voz de su ama
no reclamar su presencia;
Oh!! Soledad cautiva!!
Dejadme morir en este sueño
donde una vez y solo una,
su agua regaba mi campo.


Aun Más

He buscado las maneras de encontrarte, pero tus ojos son esquivos al amor, lo sé y aun así, lo intento una y otra vez.
Me reconozco enamorado sin remedio, sin arma alguna en tu presencia, simplemente dócil y entregado a ti.
Soy estremecido por tu presencia y rendido por voluntad a tus deseos.
Son  mis deseos escritos con tu nombre y con las ganas alteradas de hacerte feliz.
Estoy en la búsqueda infructuosa, aunque no del todo, de mí en ti y me sigo buscando, solo por el sublime placer de recorrerte entera.
Me siento feliz de tu mirada, de tu sonrisa, de tus gestos de niña y de mujer, feliz de tu voz y tu silencio, feliz de tu compañía sin mi soledad.
Con ganas de ser todos los hombres y a la vez el único para ti.
Y finalmente me encontré amándote más y aun más...

Dormir en casa ajena.

Pasa por ser un tanto raro, esto de despertar y no saber en dónde. Es algo incómodo encontrarte en un sitio que no es tu espacio. Girar y en...